La Fortaleza del Pandemónium - Un curioso "Reencuentro" - "No vendrán a buscarte" [Privado Aludrag]

Dos días después de nuestra reunión demoníaca en la ciudad de Dite, en pleno Infierno, nos dirigimos con mi señor Lerael a través de un portal crono-dimensional a un lugar específico en el pasado... exactamente a más de 5 mil millones de años atrás. Vi los datos en un GPS que los demonios tecnópatas me habían pasado y comprobé que el lugar era correcto.


La Fortaleza del Pandemónium del pasado... un antiguo baluarte que sirvió como bastión para repeler los ataques de los demonios y demás Criaturas de la Oscuridad durante la Guerra de los Pecados. Tal maravilla dimensional estaba ahora frente a mis ojos, y yo la estaba contemplando maravillado... Ahora sé por qué fue la única fortaleza que sobrevivió, y por qué ese desgraciado del ángel Tyrael cuida muy bien aquello que le es asignado.

Ojalá no nos encontremos con ése ángel, mi señor, de lo contrario nos chafaría todo el plan.

Lerael: Descuida, recuerdo este día como si acabase de pasar, este weon tonto de Tyrael anda de juerga con Alastor y otros amigos suyos, celebrando su última victoria, por lo que no nos molestará para nada. Ahora, apúrate, enfermo.

Apresuré entonces el paso a través del largo río de llamas que rodea el lugar, mientras pensaba en lo curioso que encontraba el lugar, ya que separa el Infierno de Terra y el Mundo de los Humanos en una localización totalmente estratégica. Ya me imaginaba lo sangrienta que debió haber sido aquella larga batalla que dejó este lugar casi convertido en ruinas.

Luego de unos minutos llegamos a la entrada del lugar, unas largas e infinitas escaleras nos separaban del enorme edificio, y con la esperanza de que mi objetivo a eliminar se encontraría arriba, comencé a subir.

Me estaba paseando por los pasiloos de la fortaleza totalmente aburrido y absorto en mis pensamientos: Ese weon de Tyrael ya se fue de carrete, como si el hubiera sido el que sello a los demonis mayores, el muy payaso, ese comportamiento lo va a ser cagar en el futuro.Fue entonces cuando senti una presencia bastante familiar que se aproximaba al castillo lo cual era imposible por que yo mismo habia sellado esa presencia hace poco tiempo. Llegue a la entrada y por la escalera subia un figura humana desconocida pero la presencia era fuerte y bien conocida por mi, pero lo mas extraño es que era antigua, pero no po eso menos poderosa que antes, desenfunde mi espada larga y dije en un fuerte grito:NO SE QUE CLASE DE TRUCO ES ESTE, PERO NO DARAS UN PIE DENTRO DE ESTE LUGAR DESGRACIADO, PERO SI HAZ VENIDO A MORIR, CON GUSTO TE CONSEDERE TU DESEO.

Tú debes ser el tal Aludrag, ¿no es así? Pregunté desinteresadamente mientras subía velozmente y conjuraba con mis manos una de las espadas de mi señor: Alma del Caos.

Si ese bastardo que estaba frente a mí iba a atacarme, con gusto le daría una pelea que jamás olvidará, aunque esperaba en el fondo que mi señor me ayudara, pero no reaccionó aún, como si esperase pacientemente a que algo sucediera.

Hell Hall convoco mi mejor poder, acto seguido uso mi dominio sobre el fuego para encerrar al individuo en un domo de fuego.

Alucinante, has caido en la trampa mas vieja del mundo, eso pasa por sen un demonio de mierda que busca lo que no logro antes, bueno ahora solo queda ver como el cuerpo que escogistes se convierte en cenisasy tu buelves a donde esats sellado. JOJOJO

Lerael: ¡¡¡Huuu, que es weooon!!! Durmiendo como siempre, ¿verdad?

Mi señor reaccionó justo a tiempo, logrando que el actual escenario se difuminara como un montón de pintura escurriéndose por la pared. Una vez que todo acabó, aparecimos Aludrag y yo justo en el vestíbulo principal, yo, transformado en mi señor, con Alma del Caos a punto de ser clavada en su cuello y él en el suelo... Cualquiera se reiría al ver su cara de "¿WTF?"

Solo tengo algo que decir, DANZA DE LO 100 DRAGONES al estar a tan corta distancia recibe todos los impactos, sabia que el desgraciado usaria una de sus clasicas ilusiones espere a que bajara la guardia,yo tanbien aprendi uno que otro truco nuevo, Uf, casi me saca la cresta, un poco mas y soy historia,pero como me gusta decir: Me encanta cuando un plan da resultado"

Afortunadamente era demasiado predecible que hiciera eso aprovechando la corta distancia, por lo que aproveché tambien yo de engañar a Aludrag utilizando un clon zombie. Nuevamente el lugar se distorsiona, dejando a Aludrag rodeado de mis servidores muertos vivientes y mi señor haciendo lo suyo con un ejército de súcubos rodeando el lugar.

Será mejor que te rindas y vengas conmigo, Aludrag... Dijo Lerael, hablando a través de mí. Eso si quieres que tú y tu pocilga de fortaleza quieren seguir en pie...

Punto uno, esta no es mi casa, es de Tirael, dos, tu y tus mierdas de sirvientes no me dan miedo y tres, el dia de la tuza me vas a derrotar pedaso de demonio con nariz de dos kilometros. Acto seguido saco mi espada y con una rapidez increible destaso a los zombies y sucubos que estaban a mi alrededor.

Ahi quedaron tus weas de tropas, anciano narigon

Lerael: Buena demostraciòn, te has librado de mis tropas, pero aún así te costará aun más librarte de mi.

Diciendo eso, usó mi cuerpo para darse impulso, y abalanzándose de una manera increíblemente rápida, envió una enorme cantidad de tajos, hasta que finalmente lo embistió, empujándolo a 30 metros fuera de la entrada de la fortaleza.

Lerael: Ahora llegó el momento de acabar con esto de una buena vez...Dijo entonces mi señor, tomando completamente mi cuerpo (transformándome en él) y sacando una fabulosa y terrible espada: La Espada del Caos... sentí algo de miedo en mi interior, ya que noté que realmente mi señor lucharía en serio.

Logro caer de pie y veo como el humano se transforma completamente en el cuarto demonio mayor, asumo una posicion de guardia con mi espada y de digo:
Por fin te pones serio anciano, bueno ya calente mis musculos, ahora llego el momento de darte una paliza de la cual se escribiran leyendas. Corro hacia el, pego un salto y cargo con toda mi fuerza con mi espada hacia el

Aludrag no alcanzó siquiera a tocar a mi señor cuando de pronto una especie de agujero oscuro apareció en el lugar, absorbiéndonos a los dos. Aparecimos entonces en un lugar en el que nunca había estado...Todo estaba cubierto de oscuridad profunda y lo único que se veía era una especie de círculo azul con una espada de rojo filo en el centro.

Lerael: Apuesto a que ni siquiera eres capaz de acordarte de este lugar, Aludrag...

Mi señor sonrió con sorna mientras se colocaba al centrodel círculo y se ponía en posición de combate.

Nome amedrentas trayendome a este lugar, viejo, solo retrasas tu muerte. En eso siento en mi mente como se detieneel tiempo y ocupo todo mi conociento y mi experiencia estrategica par planear mi ofensiva:Primero golpe a la derecha con el puño, eso lo obligara a bloquear, con la espada en mi mano izquierda lanzo un corte al pecho,por el dolor el brazo de la espada quedara algo flojo, golpear el brazo,se tambalera, barrida a las piernas. Diagnostico, herida profunda en el pecho, brazo dislocadoposible traumatismo de columna, recuperacion media, oportunidad de una estocada final, muy alta. Y empieso con mi plan.

Mi señor sonrió con sorna, al parecer podía adivinar lo que mi oponente iba a hacer. Y se pudo demostrar cuando Aludrag golpeó a la derecha con el puño. Mi maestro esquivó el golpe y cuando venía el espadazo al pecho, Lerael simplemente le tocó la unión del antecodo con los dedos índice y medio, provocando que toda la articulación se durmiera.

Luego de eso, dió unos pasos hacia su izquierda y colocándose súbitamente al lado de Aludrag, clavó mi katana en su espalda.

Lerael: Siempre tan predecible, muchacho tonto... Podrías haber aprendido a actuar más y pensar menos... Pero de tal palo, tal astilla, ¿no?

Luego de decir estas palabras, mi señor sacó la katana de su lugar, haciendo que un leve chorro de sangre manchara este profano lugar.

FFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUU Siento como la ira recorre mi ser y con todas mis fuerzas le entierro la espada en el estomago, despues me paro, junto toda la energia que poseo en mis manos. DANZA DE LOS 100 DRAGONES Cierro los ojos y solo siento los impactos, 10, 30, 50, 100, 250, voy llegando por el 499 abro los ojos, pego el ultimo golpe y grito TOMA YA

Finalmente el duelo entre Aludrag y mi senor se estaba poniendo interesante, la habilidad de mi contrincante era excelente e impecable, pero no supe por que Lerael no esquivo mi ataque.

Lleno de dolor, me aleje de mi oponente e intente contraatacarle, pero un atisbo de debilidad y cansancio hizo que no diera ni dos pasos y trastabillase.

Lerael: que sucede? acaso no puedes levantarte, asqueroso humano?

Lerael... por que no me ayudaste?

ahora entendi inmediatamente por que recibio el ataque, haciendo que mi cuerpo recibiera todo el dano. Entonces Lerael rio burlonamente y apoderanse nuevamente de mi cuerpo tomo mi katana y se abalanzo contra Aludrag gritando a viva voz:

Lerael: ATAAAAAAAACA FALLAMON Y LA WEA!!!!

VAMOS MIERDA, QUE EMPIESE LA TERAPIA FAMILIAR, CARA DE MONO Y A RE CTM.
Me avalanzo a toda velocidad, bloqueo su espadaso y acto seguido le doy un gran tajo en el brazo derecho con gran habilidad

Lerael: Rico tu masaje... Contesta mi señor de manera burlona y sarcástica.

Luego de unos minutos de embistes, choques, golpes y tajos que iban de un lado a otro, en un arranque de destreza, derribo a mi oponente de nuevo.

Lerael: HA HA HA... Te tengo justo donde quería, ahora me encargaré de que nunca te encuentren

Y diciendo estas palabras, comenzó a acumular una enorme cantidad de energía oscura, la que se juntó alrededor de sus manos formando una especie de arma bastante terrible y oscura.

Mi señor... ¿No estará haciendo lo que creo que está haciendo?

Lerael no respondió, sino que se limitó a reír como sádico sin importarle nada, si hacía lo que yo creía, significaba que perdería parte de mi energía vital (mal que mal, fui yo quien selló a Lerael dentro de mi cuerpo), y el lugar al que fuimos transportados colapsaría enormemente... temí que mi señor estuviera haciendo esto en serio...

Veo lo que hace, pero mientras se rie como el tipico maniatico con una enorme frustraccion sexual, chasqueo mis dedos creando una pequeña explosion de fuego en el rostro de mi oponente, me deslisopor debajo de las piernas de mi oponente, me paro y le aplico una llave para dejarlo inconsiente y que bote la espada.
Despues me subi encima de el y le empece a dar combos en la cara
VAMOS MALDITO, DESAPARECE DE UNA PUTA VEZ DE ESTE MUNDO

Ya no podía más... Afortunadamente Aludrag distrajo a mi señor para que no ocupara "Esa Espada", pero lamentablemente al consumir gran parte de mi energía vital, me dejó muy débil. Creí que sería mi final...

Pero afortunadamente mi señor siempre tiene ases bajo la manga. Reaccionando de una manera rápida y violenta, sujetó ambos brazos de mi oponente y sonriendo sádicamente dijo:

Lerael: No te preocupes, me iré pronto... pero conste que te dejaré un recuerdo de mi parte... HA HAHA HAAA.

Y diciendo esto, en cosa de unos instantes vi como la piel de los brazos de mi enemigo comenzaba a arder y a inflamarse, creando innumerables llagas que dejaban ver carne y hueso, dejando un olor a podredumbre.

Luego de dejar ese "recuerdo", mi señor usó mi cuerpo para levantarme, y tomando la Espada del Caos, la colocó sobre la frente de Aludrag, y mientras sonreía burlonamente dijo:

Lerael: Cualquier cosa... Nunca tuvimos este enfrentamiento.

Después abrió un agujero dimensional que nos absorbió nuevamente a los dos, dejándonos en una especie de selva bastante poblada y quizás muy alejada de la Fortaleza del Pandemónium. Pensé durante mi momento de debilidad que Lerael había dejado a Aludrag allí con la idea de que le fuera más difícil volver a ese lugar y dificultar también la tarea de nuestro enemigo de encontrarle, lo cual encontré bien por él.

Ahora solo cabía esperar que los brazos de mi oponente tardasen mucho en sanar, y que nuestro enemigo no lo encontrase jamás.

Sentia un intenso dolor en mis brazos mientras escuchaba lo que decia el desgraciado de Lerael y caigo inconciente, lo siguiente que recuerdo es que estaba debil y me encontraba rodeado de arboles.
AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH
El dolor era insoportable, senti que ya habia llegado mi hora

El dolor en mi cuerpo iba cada vez más in crescendo, pero aún así mi señor Lerael hacía que mis huesos avanzaran paso a paso... La selva en la que estábamos era bastante frondosa y parecía casi infinita y a medida que avanzábamos, me sentía cada vez más muerto por dentro.

Mi señor... por favor... deténgamonos... Mis heridas... no resisten más...

De pronto mi señor hizo que mi cuerpo se detuviese en seco, sentí que sonreía de manera extrañamente piadosa.

Lerael: Aguanta un poco más, Adam Cross... los muelles cercanos a Kurast no deben estar muy lejos de aquí, así que andando, sucio humano.

Y diciendo esto, forzó un poco más la carrera, arrastrando yo mi cuerpo a duras penas.

Kurast... la selva desolladora... tenía entendido mediante antiguas leyendas sobre la Guerra de los Pecados que todo el lugar había sido corrompido por Mephisto... me habría gustado mucho encontrarme con el Mephisto del pasado y aprender algunas cosas de él... aunque no sé por qué tengo el presentimiento de que Lerael no pretende que nos lo encontremos en ningún momento, para no alterar demasiado la línea temporal.

Con este pensamiento, Lerael y yo empezamos a andar...

Off: TEMA CERRADO.