¿En dondé estoy? [libre para quién guste]

Había estado viviendo en aviso lugares in pertenecerá ninguno mucho tiempo. Su inhabilidad de hacer amigos y a eso sumado su conocimiento que sus amigos morirían, pues hasta la “muerte” pasa a otro plano existencial hacia que no echara raíces en ningún lado.

Igual eso tenía sus ventajas, entre mas lugares conociera a mas lugares se podría ir utilizando su guadaña cuando quisiera viajar. Mientras todo eso pasaba en su mente, también había otro pensamiento persistente que le daba algo de incomodidad pero que no quería contemplarlo todavía, por vagar sin saber a dónde iba, ahora se encontraba sin tener idea de donde estaba. Podría solucionar su dilema si se tele-transportaba al último lugar en donde estuvo, que lo conocía, pero todavía se encontraba un poco cansada de la ultima que uso sus podres, y no quería regresar a ese lugar. Allí solo había encontrado muertes y silencio. Nada a lo que le apeteciera regresar.

Ahora se encontraba caminando en una ancha vereda que en la cual la gente se encontraba caminado haciendo sus compras, yendo a trabajar y todas las pequeñas cosas que hacen a la rutina de todos los días, es decir estaban viviendo sus vidas.
Sus pasos continuaban firmes bajo el sol, que era bien brillante y derramaba su calor en el cielo celeste sin nubes. Si no fuera por la suave brisa que recorría en el ambiente el calor seria molesto, pero la temperatura se encontraba perfecta.´

Mientras caminaba con su rostro calmo y sus anteojos oscuros protegían sus ojos de ese resplandor se preguntaba como averiguar en donde estaba y consideraba la posibilidad de vivir un tiempo en esta zona.

Luego de diez minutos de caminata llego a una plaza construida con una forma ovalada, con una fuente cuadrada en el centro y muchos árboles y flores de diversas variedades y colores que destacaban entre el verdor predomínate.
Parecía un paraíso en el medio de un laberinto de cemento y cristal. Es hermoso.

Cuando llego al centro de la plaza se saco sus anteojos oscuros y los guardo en el bolsillo de su pantalón color crema y miro a las personas. A la primera persona que se acercara lo suficiente le preguntaría en donde estaba.
Sin esperar mucho tiempo, una persona se le acerca y murmura –Disculpa, me podrías decir en dónde estoy?-