Conociendo el bosque

Me levanté después de haber respirado tranquila y que me pasó el susto de que el ave me haya salido de golpe mientras estaba distraida. Recuerdo que alguna vez mi hermano me había hablado de este tipo de aves, mas grande de lo normal e que incluso podían montarse si necesitaban un medio de transporte y ésta estaba bien entrenada. Aunque no recuerdo el nombre...

-bocho...chobo...¡Chocobo! ¡Eso era!- pensé feliz al recordar aquel nombre al fin. Sacudí el polvo que había en mi ropa y me dispusé a seguir cuando sentí que había alguien cerca mío, así que voltee algo sobresaltadea aún (hoy creo que estab más nerviosa o distraida que lo normal) y vi que había un hombre, de cabellos largos que vestía con un kimono y llevaba una máscara, así no se veía su rostro. Aunque sentí curiosidad de saber quién se escondía detrás de la máscara, me quede en mi lugar.

-Emm... ¿hola?- saludé un poco desconcertada de sí debía o no llamar su atención, pero aún así, una sonrisa se dibujo en mi rostro.

El kitsune observó a la chica que la que parecía ser una persona un tanto nerviosa, quisas por la presencia de Scias, cosa normal entonces, ya que mucha gente suele ponerse de esa forma a verle de cerca. Permanecido por unos segundos en silencio tal vez para pensar en lo que podía decir. Sin embargo la razón era que Scias sin inmutarse estaba examinando con la vista a la chica que tenia delante.

-¿Todos los humanos sois así de tímidos o es solo tu caso? Dijo serio y extrañado, pero a la vez con algo brusquedad por haber empezado una conversación con aquella frase tan directa.

Aunque Scias no pensaba al 100% que se tratara de una humana, tenia el mismo aspecto que uno de ellos, y se comportaba igual que ellos, pero su olor era diferente al de ellos. Aunque dudando de la situación, Scias no creía que fuera peligrosa de modo que no se puso en alerta por ahora.

No dijo nada mas, tan solo espero a ver cual era la respuesta de la chica, si seguía igual de cortada por su presencia, o se mostraría mas firme ante él.

-¿Tímida?- repetí asombrada por la impresión que se había llevado de mí -yo puedo ser muchas cosas, menos tímida- dije más segura ya, creo que ya habái pasado todo el alboroto por el que me había puesto tan nerviosa o tímida.

-Además de que no soy una humana. No te confundas- dije haciendo enfásis en la última parte de la frase con una sonrisa en mis labios -soy un vampiro- dije con tono dulce revelandole mi naturaleza sin darle mucha importancia a ello, ya que si hubiese querido atacarme, desde el primer momento lo hubiera hecho, cuando aquel ave me asust´y estaba desprevenida, asi que no pensé que fuese algo de mayor importancia decirlo.