Libros, libros y más libros...

Me encontraba en una biblioteca de gran tamaño en medio de un país del mundo humano cuyo nombre no me acuerdo. El lugar revosaba de libros, y quería aprender algo de la cultura de aquel mundo ya que en el mío los libros de historia trataban de peleas entre vampiros contra licántropos y hombres lobo o de como los vampiros nacieron y domiranos a los hombres lobo hasta el día de la revelión, pero ese no era el tema. La biblioteca revosaba de libros, ya había acabado de leer un libro que narraba sobre la segunda guerra mundial y como perdieron los nazis, aunque en realidad no perdieron la guerra, eso era lo que dijeron, los científicos nazis se refugiaron en norteamérica y ayudaron en la construción de soldados inmunes a radiación y cohetes para llegar a otros mundos. Pero igual los humanos no sabían de las otras dimensiones por lo cual esos "superavanses" no eran gran cosa.

- Haber... un libro bueno..., - decía mientras inspecionaba la biblioteca.

Luego de buscar detenidamente por muchos estantes pero luego de un rato comenzó a caminar por ahí para irse ya que no habían cosas muy interesantes en esa biblioteca de ese mundo. Distinguí un olor, un olor que no probenía de un humano, un olor metálico, olor a aceite, comené a seguir ese olor para ver que robot lo emitía. Pasé por un pasillo donde se encontraba una niña, el olor a androide parecía emitir de ella, o eso creía, no había nadie más enese pasillo que nosotros y algo de ese lugar emitía ese olor, o era un libro con olor, lo cual no creo que exista, o era ella. Ya que los libros de ese tipo no existían, deduje que probenía de la joven. Comenzé a caminar hacia ella pasándola de largo y viendo que hacía gracias a mi vista por vibraciones. La joven sacó un libro justo cuando estaba pasando por ahí yo por lo cual me golpeó al sacarlo. Definitivamente era ella, ese golpe había dolido, solo era una niña, pero como estaba echa de metal el golpe fue un poco fuerte. Dijo que lo sentía y me llamó señor.

- Dejá, no importa, dime si estoy en lo correcto pero eres una androide, ¿No?-, le dijo directamente sin saber él su nombre ni ella el de él

Dijo que no era una androide lo cual era mentira por 2 cosas: 1, su olor, el cual era metálico y no de olor a carne, 2, podía ver su cola gracias a mi visión la cual me permitía ver alrededor de las cosas. Dijo que era una niña común y corriente que había venido a leer, no le creía lo de que era humana pero si lo de que había venido a leer. Digo, que otra cosa se podía hacer en una biblioteca. Vi como miraba a sus pies mientras lo decía y yo me quedab callado esperando a ver que pasaba, si seguía diciendo que era humana iba a mencionar lo de que se le podía ver la cola pero no era momento de eso.

Me tomó de la mano rápidamente, tenía una mano fria, como la mía, solo que ella tenía más fuerza en las manos que yo por ser un androide. Me llevó a la sección de clásicos comenzó a buscar algo, un libro. Me dijo que leyese la caida de la casa Usher, (Off: Es un cuento no un libro, lo leí, no da miedo ni para un niño de 10 años ¬¬), dijo que le había dado miedo cuando lo leyó y que me lo recomendaba. Ya lo había leido pero le seguí la corriente para ver que pasaba. La niña hizo un pucheo y confezó su identidad.

- Lo se por el simple echo de que hueles distinto que el resto de los humanos, no hueles como un humano normal, hueles como a robot, simplemente por eso -, dije sin mencionar lo de la cola, no era momento de que supiera sobre sus poderes, no todavía, - Y el libro, ya lo leí, y ya se que es bueno, el simple echo de ser de Poe hace que el libro sea bueno -, dije demostrando que era culto ewé.

Ya le había confesado las causas pero ella no sabía que yo era un vampiro por lo cual era un punto a favor para mi. Pero como me gusta la igualdad de conosimientos me atreví a decir, - Yo soy un vampiro, mi nombre es Andrew, un gusto conocerla, señorita... -