Welcome To Brotherhood

La cascada celestial, un lugar fresco y relajante para la mayoria de las personas que frecuentaban el lugar. Para desahogar sus penas o para salirse de la rutina por un tiempo predeterminado. Se podia respirar un aire fresco y puro en el lugar, el sol poco a poco se escondia para dar paso a la luna. Haciendo que en el lugar hubiese menos luz natural, viendose oscuro por la sombra de los arboles, que se mecen junto al viento que sopla en el lugar. Ezio caminaba por el lugar cercano al rio, junto al puesto que habia reservado en el que habia una fogata y un Fierro quemador en ella calentandose. llevando su vestimeta de color negro representando a los antiguos maestros asesinos.

Spoiler:

Portando de armamento solo un Cestus de metal en su mano derecha, bajo sus muñecas un par de hojas ocultas y junto a la hoja oculta derecha esta el cañon oculto. Caminando a paso lento por el lugar dando vueltas, esperando a que la persona a la que aviso llegue. Con sus manos juntas hacia su espalda sujetas una de otra y con la capucha abajo dice unas palabras en un antiguo lenguaje, como de una oracion. Continua diciendo esas palabras continuamente 3 veces mientras camina alrededor del lugar cerca de la fogata. La caida de agua se escuchaba mas que su voz, camuflandola con el ambiente.

Las heladas brisas de la caída del agua se esparcían por la arboleda creando un húmedo ambiente, layla caminada con atención al relajante sonido por el oscuro camino esperando ver pronto al hombre que la había llamado, mientras veía al cielo como unos pájaros volaban.

Al pasar un rato se paro en un árbol con los ojos cerrados, pensaba que se había perdido pues no había señal alguna que le dijese lo contrario, tras la soledad tubo un poco de nostalgia por su pasado y su situación actual, lamentándose de las molestias que un humano debía pasar, hambre, sueño sed y ahora frío. Siendo el único consuelo el seguir viviendo para ver esa hermosa y tranquila noche. Luego siguió avanzando para no hacer esperar a su amigo.

Mientras avanzaba el frío aire entraba por sus pantys rotas y sus mangas sueltas, sus cabellos se balanceaban por la brisa y sus dientes tiritaban sin poder evitarlo. Sus tres cruces golpeaban su pecho mientras caminaba y sus brazos trataban de mantenerse cruzados tras el frío que sentía.

Pasado unos minutos la noche ya era plena la oscuridad había invadido por completo su camino y aun no llegaba a su destino, fue entonces que vio una de sus cruces y empezó a rezar para que brillasen y guiarse así con su luz. Nunca había pensado que los humanos sufrían tanto por sus pecados.

Seguía caminando cuando a lo lejos divisa la luz de una fogata y un hombre muy sospechoso, se dirigió al lugar rápidamente, pues sabía que era a quien estaba buscando.

Aun caminando lentamente en circulos, con los ojos cerrados pero con los sentidos activos a cualquier presencia o imprevisto que fuese a suceder en el lugar. Sintiendo en aquel momento la presencia de un ser que se aproxima al lugar rapidamente, abre sus ojos en direccion al ser. Viendo poco a poco la forma de una joven que se aproxima cada vez mas cerca puede detallarla. Sonriendo al ser la persona a la que espero toda la tarde. Me alegra de que hayas venido...

Posando luego su mano diestra en la seccion de su corazon con el puño cerrado, procede a bajar su cabeza y su cuerpo para hacer una reverencia de respeto a la joven. Levanta su cuerpo y su mirada, ahora dirigiendose mas cerca hacia la fogata para quedar a su lado derecho. Mientras le hace una seña para que la joven se aproxime tambien al lugar dice unas palabras en un antiguo idioma. Laa shay'a waqi'un moutlaq bale kouloun moumkine

Mientras dice aquello posa nuevamente su mano derecha en la seccion de su corazon, pero esta vez con la palma abierta, respira calmadamente esperando a que la joven se aproxime lentamente. El Fierro quemador se encontraba al rojo vivo por el tiempo que esta expuesto en las llamas de la fogata improvisada que hizo el asesino.

Al llegar al lugar y ver que su compañero le sonreía se digno a acercarse a el, sintiendo el calor de la fogata, luego al ver que este
le hacia una reverencia dejo de caminar, pues se sintió algo avergonzada por el acto de caballerismo y mirando hacia un lado, comenzó a caminar lentamente.

El frío aun le atormentaba a la joven, así que, siguiendo la señal de aquel hombre caminó a la fogata mirándolo esta vez a los ojos, ya que aquel sospechoso hombre había pronunciado una frase en un idioma que ella desconocía, lo miraba con sorpresa y algo de miedo, pues a pesar de haberle visto antes, no había tenido la oportunidad de intercambiar palabras por lo que solo se digno a preguntar tímidamente : ¿ que es lo que acaba de decir?, ...perdón por mi ignorancia pero mi estadía ha sido corta por estos lugares.

Luego tras ponerse frente a la fogata, admiró por unos segundos el fuego, disfrutando del calor que éste le brindaba, luego algo sonriente cerro los ojos y miro al hombre preguntándole :- ¿ que es lo que quiere un caballero a estas hora en un lugar tan vacío?

Manteniendose en su posicion firme antes mencionada, observa como la joven llega a la fogata y de como se acerca lentamente, mostrando una señal de desconfianza ante el y las palabras que acababa de decir anteriormente. Quieres ser parte de los asesinos? Pregunta claramente ante la joven De ser asi, entonces debes hacer un acto de fe y un juramento ante la hermandad. Aquellas palabras son parte de dicho juramento. Aproximate un poco mas. Diciendo con su voz tranquila y seria. Esperando a que la joven llegara a donde le pedia.

Extendiendo su mano izquierda de frente hacia la joven dice. Tu dedo anular. Asi deja su mano extendida, esperando la respuesta positiva o negativa de la joven ante su propuesta. Mientras la noche y el frio -que no le afectaba por la cantidad de ropaje que porta- se apoderaba del lugar, los sonidos de la noche mezclados con el sonido de la gran caida de agua del lugar, hacian un tono no tan armonioso para quien estubiese cerca. Ezio no le prestaba atencion a aquel sonido. Estaba concentrado en la respuesta de la joven ante la iniciacion.

Tras tal oferta del hombre se sorprende con una sonrisa macabra en su rostro y con sus ojos aun serios le contesta:- Eso suena muy interesante- mientras pensaba que la gran oportunidad que había esperado había llegado.

Se acerca con gran confianza al hombre y deja que éste le extendiese su mano en su hombro y no se queja como comúnmente lo haría si alguien le tocase y le dice: -Sabía que venir hacia acá no iba a ser en vano, además como negarme a aquel hombre que compartió una copa conmigo.

La noche oscura no se comparaba con la actitud de la joven, por primera vez el odio encerrado en su alma se sentía casi libre y sabía que tarde o temprano lo sacaría con furia . La mirada de odio de la joven nunca se había visto tan temible y con tanta esperanza por lo que solo se digno a soltar una leve risa de niña cruel.

Sonrie ante tal respuesta de la joven. Sabiendo que tenia razon en sus palabras, toma el dedo anular izquierdo y lo extiende hacia el, dejandoselo alli suspendido. Se dirige hacia la fogata para posteriormente tomar el fierro quemador que alli se calentaba, mientras dirige unas palabras. La sabiduria de nuestro credo se revela en estas palabras... Se dirige hacia Layla nuevamente, apuntando la punta del fierro que estaba al rojo vivo un poco mas atras de donde se encuentra la uña de su dedo, asi ase presion sobre el para marcarle con calor el simbolo de los asesinos en su dedo. Tomando eso como el juramento hacia la hermandad.

Actuamos en las sombras para servir a la luz... Somos asesinos. Dice mientras termina de ejercer la presion sobre el dedo, posteriormente posicionaria el fierro donde anteriormente estaba, caminando nuevamente hacia ella para posarse de frente. Y siempre recuerda... Nada es verdad. Todo esta permitido. Finalizando esas palabras pone su mano derecha en la zona donde se hayaria su corazon, cerrando el puño haciendo una reverencia que espera que ella tambien le corresponda.

Al ver que el hombre sonrío con la respuesta, se alegra un poco de la emoción de la oportunidad que se le había presentado y de un momento a otro siente que el encapuchado le toma su dedo anular izquierdo y se lo extiende hacia el, haciendo que la joven lo dejase en el aire mientras el se aceraba a la fogata. Ciertamente le extraño la actitud del hombre y antes de que le preguntase que iba a hacer el hombre tomo un fierro que estaba en la fogata y se dirigió hacia la joven.

Ese fierro había estado sobre el fuego desde que ella había llegado al lugar por lo que se asusto un poco al sentir el calor que este emitía, fue entonces que el encapuchado acerco el fierro hacia su dedo y empezó a hacer presión en este, haciendo que la joven cerrara los ojos instintivamente. Ella nunca había sentido esa sensación, para ella era algo difícil de soportar, pero algo le hacia que se quedase lo mas quieta posible ya que entendió por las palabras que escuchaba, que era parte del ritual que había aceptado integrar.

Después el hombre dejo de presionar su dedo y dejo el fierro donde estaba Layla se percato de un olor a carne y al ver su dedo se dio cuenta que había una marca. Luego levanto su rostro y vio que el hombre estaba haciendo nuevamente una reverencia hacia ella y ella algo avergonzada solo inclino su pecho hacia delante tratando de imitar a su acompañante. Luego cuando el hombre se levanto lo miro a los ojos y luego miro su dedo que se estaba regenerando poco a poco sin borrar el sello, gracias a la cruz de su pecho que se activo al sentir miedo cuando tocó el fierro, preguntándole luego:- ¿que es éste sello?- , mirándolo como si no hubiese sentido nada y con la misma energía del principio, esperando a que le contestasen y le dijeran lo que significaba aquel sello que habían hecho en su dedo.

Manteniendo la señal de la reverencia, Ezio escucha la pregunta que le hace la joven. Observandole de manera seria responde a su inquietud. Ese sello es la representacion de nuestra fuerza. La simbolizacion de nuestro ser y nuestra cultura. La pureza de nuestro trabajo. Responde asi a la pregunta de la joven Layla. Dejando ahora su mano abajo e iniciando una marcha que espera que Layla corresponda, dirigiendose hacia la punta de la cascada a un paso lento y firme. Oyendose como sus botas chocan contra el agua haciendo el tipico ruido del contacto. Correspondido por las rocas que estan en el lugar fiemente distribuidas.

La noche se hacia cada vez mas oscura. Llegando casi al punto de no verse nada por la poca luz que habia y por los grandes arboles del lugar. Los sonidos tipicos de la noche se hacian presentes. Los grillos, los buhos e incluso algunos lobos se escuchaban a la gran distancia que se encontraban ellos.

Tras escuchar la respuesta y saber que era lo que significaba exactamente la marca en su dedo, vio como el hombre se alejaba. Se podía escuchar como sus botas chocaban con el agua y las piedras y al ver que éste se alejaba hacia la punta de la cascada, caminó lentamente tras él, aun quería seguir averiguando mas sobre aquella hermandad.

Mientras caminaba sentía la humedad en sus pies y trataba de ver el cielo de esa oscura noche, solo se podían escuchar los ruidos de la naturaleza que al mismo tiempo la relajaban. Por la poca luminosidad del lugar, apenas podía ver a su acompañante, no se atrevía a preguntar donde iba o si ya era hora de irse a casa, pero su instinto le decía que debía seguirlo, o quizás la joven deseaba ver donde iba, de cierta manera ese hombre había despertado el interés en Layla, el mismo interés que sentía desde lo altos de los cielos cuando miraba a los humanos y su libertad. Solo que esta vez, nadie le castigaría por seguir lo que admiraba, después de todo, ella ya formaba parte de la hermandad de aquel hombre y seguirlo no sería un gran riesgo que correr.

Mientras avanzaba trataba de explicarse un fin de dudas de la corta estadía que llevaba en la tierra, teniendo cuidado de no perder de vista a quien seguía, pensaba que ya se había echo de varios conocidos que, de alguna manera, le ayudaban a seguir con vida por estas tierra que ella apenas conocía, es mas, la misma tierra que pisaba le parecía extraña, tubo suerte de encontrar el camino ciertamente.

Pensaba que la gente es muy fácil de convencer y confiaba lo suficiente para no hacerle daño a quien ha conocido y/o ha establecido una conversa o una simple compañía, eso no le tenía tranquila, ya que ella desconfiaba de la humanidad, toda su vida había escuchado que eran seres despreciables, que aun llenos de pecados se salen con la suya una y otra ves, como si dios los dejara hacer lo que se les apetezca, no como los ángeles, que son tratados con mano dura y llenos de reglas.

De cierta forma, la situación en que se encontraba en ese momento le producía cierta desconfianza, un lugar tan oscuro con un hombre quizás mas fuerte que ella, era su única compañía y ni siquiera sabía si realmente ese hombre estaba de su lado, fue entonces que reunió agallas y se apresuró para acercarse a aquel hombre y hacer que, por lo menos, le diera un lugar donde pasar la noche.

Corrió para alcanzarlo, pero la oscuridad y el terreno resbaladizo, ocasionaron que se cayera, haciendo que el hombre se perdiera de vista. Fue cuando levantó la mirada y tocándose su brazo, se levantó por completo para intentar alcanzarlo, pero la caída le había ocasionado la misma sensación que sintió cuando le marcaban su dedo con aquel fierro, por lo que gritó lo más alto que pudo interrumpiendo el silencio:

-Detente por favor, necesito hablar un poco mas contigo


Lo dijo con tanto entusiasmo y temor a que se quedase botada en aquel lugar, que solo esperaba que el hombre le respondiese a su llamado.

La joven estaba empapada y furiosa de tal estupidez, cerró los ojos y sintió que algo muy rápido se acercaba, fue cuando sorprendida volvió a abrirlos y vio como al hombre a quien había llamado ya había llegado, ella se sintió un poco avergonzada ya que estaba mojada y herida, no podía mantenerse en pie siquiera, además, era la primera vez que pedía ayuda.

Miró a los ojos de aquel hombre y con timidez le dijo: - debes creer que soy una idiota…pero, ¿me puedes ayudar?

La muchacha bajo la mirada sonrojada y luego intentó pararse por si misma pero no podía, miró nuevamente al hombre y sintió un escalofrío por la humedad. Por lo que volvió a dirigirse al hombre y le dijo:- ignora mi estado solo quería que me siguieses contando de la hermandad, además quería que me acompañaras esta noche, no es de esas en las que me gustaría quedarme sola, por lo que….solo quería tu compañía.

Ni siquiera ella sabía que sentía en ese momento, no sabía porque necesitaba tal compañía, y sentía en su interior que le debía algo a aquel hombre, estaba muy confusa, no sabía nada de las emociones que podía llegar a sentir con el cuerpo terrenal y ahora solo quería aclarar esas dudas, pensaba que aquel sujeto la ayudaría también en eso.

Luego sin más que pensar, miró otra vez con timidez al hombre encapuchado y le dijo: - últimamente no he sabido como vivir en estos lugares, me ha pasado solo tragedias, y he sentido cosas, creo que son los que los humanos llaman emociones y sentimientos, tal ves tu podrías aclararme algunas cosas, en fin solo nos hemos visto un par de veces pero no tengo el gusto de saber su nombre, ¿me lo dirías?, agacho nuevamente su mirada y espero respuesta pacientemente. Solo quería que no pensase mal de ella por tanta ignorancia, pero tenía la esperanza que por lo menos ese hombre la ayudaría y no se reiría en su cara.

Estando cerca de la joven, le mira de pie a cabeza. Totalmente mojada y al parecer muy furiosa, pues su energia la delataba. Escuchando atentamente las palabras de la joven. Sonrie notablemente y deja su mirada fija en los ojos de ella. Para nada, y claro. Te ayudare con gusto. Observa como esta dirige su mirada al suelo, se posiciona a la derecha de ella, asi toma el brazo derecho de ella para rodear su cuello, mientras que su brazo izquierdo lo usa para rodear la espalda de ella. Asi se posiciona para ayudar a la joven para caminar junto a ella ayudandola. Lentamente camina hacia adelante, escuchando ahora otras palabras que dirige a el. Responde.Vale, si quieres saber mas sobre la hermandad, con gusto te hablare sobre ella. Y si necesitas compañia. Tambien puedo brindarla. Continua con la sonrisa en su rostro dibujada. Caminando lentamente hacia una direccion para poder acampar. Ya que era muy tarde como para volver a la civilización. Responde a las ultimas palabras de la joven Ezio Auditore de Florencia. Y.., Que tipo de emociones has sentido? Te llevan a hacer algo? O son solo sentimientos? Y apuesto a que no todo sera tan dificil de ahora en adelante. Sonrie ante sus ultimas palabras, observando a la joven a los ojos mientras continua caminando.

Lo miraba con algo de sorpresa mientras la ayudaba a levantarse, luego le da las gracias con un gesto en el rostro sonrojándose un poco, nunca había aceptado que alguien, menos un hombre, la tocase después de su pasado, pero Ezio le inspiraba confianza. Tras la vergüenza que sentía por el contacto decidió cambiar el tema y viéndolo de nuevo le contesto a las preguntas que le había echo mientras se levantaban:

- Pues…..la verdad cuando recibo un golpe siento una sensación pues……molesta, pero cuando estoy cerca de alguien o dicen algo donde todos ríen, pues siento otra cosa que me hace sonreír de vez en cuando.
A cambio, hay otras que hace que mis instintos de ataque se activen sin necesidad de rezar a mis cruces preparándome para el combate…cuando hago eso, la mayoría de mis contrincantes me llaman cobarde, no se porque……
Cuando vivía en los cielos no sentía nada de eso, ya sabes sin emociones ni sentimientos, ya que al ángel que le nacen ese tipos de cosas es desterrado, muchos piensan que mi destierro fue tonto, pero en realidad no es como creía….pensé que amaba a un humano, cuando en realidad solo me intereso su libertad de actuar sin ser juzgado…después, cuando lo vi morir por los celos de mi dios, me di cuenta que no sentía nada solo envidia, por decirlo…pero ya era demasiado tarde, vivía con un ambicioso dios que solo quería mujeres a su lado tampoco permitiría volver a esa vida…por lo que no negué mi juicio y vine para la tierra, pero al bajar me di cuenta que los humanos pagaban un precio, ellos sentía hambre, frío, y otras cosas que hasta el momento no he sabido como se llaman como las que describí en un principio, fue entonces que he estado vagando y descubriendo cosas, avanzando tratando de no mirar atrás.

Después de haberse desahogado de cierta manera con Ezio, guardó silencio y solo dejó que aquel hombre la guiase, y ya al pasar el rato le preguntó:

-¿Dónde vamos?

Caminando por un largo rato en el frio de la espesa noche que se daba en el lugar, entre la neblina que dificultaba la observacion de la cascada. Ideandose un camino rapido Ezio ayuda a Layla en el trayecto. Maquinando una via en su mente para pasar inadvertido entre los depredadores de la noche, un atajo para llegar rapidamente hacia el bosque. Escucha las palabras de la joven, a lo que responde.No. Mientras que con la mano que tiene libre desmonta la capa negra de su ropaje, asi la sostiene mientras observa a Layla. No falta mucho. Se detiene de su andar por unos momentos. Usa la capa como si de una manta se tratase. Al arropar como puede con esta a Layla para que el frio no le afecte mucho. Supongo que tu la necesitas mas que yo. Sonrie al terminar sus palabras para asi emprender la marcha hacia el bosque y un lugar donde acampar. Tendremos que desviarnos por la derecha, asi llegaremos en un par de minutos. Señala con la mano izquierda el camino a seguir, mientras que poco a poco lo recorren.

El tiempo había pasado lentamente, el frió, la humedad y el cansancio en la joven se habían encargado de hacerle un duro viaje hasta donde seria su aposento aquella fría y oscura noche. La neblina no dejaba ver mas allá de los pasos de su acompañante por lo que no podía deducir por ella misma cuanto faltaba, por lo que había recurrido a preguntar, el dolor de su pie se hacia intenso con la helada que hacia, pero por suerte tenia a Ezio en su compañía para poder avanzar.

De pronto la voz de de Ezio resonó entre el silencio de ambos el sonido de la noche dándole como respuesta mas que suficiente una tajante, pero agradable negativa, pero aliviada con un consuelo que me indicaba a la joven que faltaba poco causándole una leve y extraña alegría interna.

De pronto ambos se detuvieron, la joven dudosa le queda mirando esperando respuesta o alguna acción por parte del otro ante tan repentina parada, fue entonces que Ezio se saco la capa y la monto como manta en los hombros de la joven sonriendo, la joven algo anonadada le quedo mirando inocente para luego bajar la mirada:

-Gracias- dijo fríamente emprendiendo ambos la marcha a lo que pareciese ser un bosque y donde los esperaba su paradero, fue que Ezio le apunto con su mano libre hacia la derecha, acotando que yendo por allí llegarían mas rápido, ella no lo dudo y doblo con cuidado a aquella dirección con ayuda de Ezio y mirando al frente decidida a llegar de una vez.

-Se que lo acabo de decir, pero gracias nuevamente, de verdad necesitaba algo así, pero ¿estas seguro que no pasaras frió? Es una noche muy helada.-

Le dijo la joven un poco preocupada aun conservando su mirada al frente.

En el auge de la noche dos sujetos misteriosos caminaban por lo que parecia ser la entrada de un bosque. Un joven encapuchado y una joven que era arropada por una capa gruesa de cuero, la cual servia de mucho para la retención del frio, Ezio. Quien ahora estaba un poco mas tranquilo porque la joven no pasaria mas frio recorre el lugar adelante siendo el cabeza del grupo. Recordando así un lugar cercano en el cual habia montado una vieja cabaña antes, la cual les serviria a ambos seres para pasar la noche a salvo de las criaturas del bosque y del frio de la noche. La joven a la cual Ezio le ha puesto la capa se expresa agradecida, a lo que este le responde solo con una sonrisa un poco mas pronunciada en su rostro.

Mientras mas caminaban mas se acercaban a su objetivo, los pasos en ambos eran lentos pero seguros. Los de la joven eran un poco mas debiles por el hecho de un mero golpe fuerte en su pié. En medio de la marcha Ezio logra oir nuevamente que la joven le dirige unas palabras, reiterando nuevamente las gracias y ademas refiriendose a su seguridad con respecto al frio, al parecer estaba preocupada por lo que la "Hipotermia" podría causarle. Desvia su mirada hacia ella para responderle. Descuida, soy una persona con una resistencia natural bastante alta, me alegro de haber nacido así. Ademas de que yo puedo calentarme por mi mismo. - Sigue sonriendo notablemente luego de sus palabras.

Refiriendose a lo de "Calentarse por el mismo" a su poder del dominio de la energia, el cual emplea en ese momento. Denotandose como su cuerpo poco a poco es rodeado por un aura de color "rojo carmesí" la cual se vuelve mas instensa con el pasar del tiempo. Esta capa de energia pura serviria como un aislante para el frio, haciendo que este traspase mas suavemente su piel para reducir el efecto del frio. Desvia su mirada una ultima vez hacia la joven para decirle ¿Tu estas mejor asi? De necesitar algo mas dimelo por favor. - Observando posteriormente el frente para seguir el camino, utiliza su "Vista de águila" para poder visualizar el frente sin la obstrucción de la neblina.